Asa la calabaza (puedes hacerlo en una bolsa de asar) durante 5 o 6 horas en ALTA.
Saca la pulpa de la calabaza y desecha la piel y las pepitas. Deja que se enfríe y repose sobre un colador durante un mínimo de 2 horas para que elimine parte de su agua.
Precalienta el slow cooker en ALTA mientras elaboras la masa.
Derrite la mantequilla ligeramente en el microondas o a fuego suave. Tan solo debe ablandarse sin llegar a estar líquida del todo. Si te pasas de tiempo y se separan el suero y la grasa, bátela un poco a mano y deja que pierda calor.
Bate los huevos y el azúcar con una batidora de varillas eléctrica durante varios minutos, hasta que la masa sea cremosa, haya crecido y haya cambiado a un color blanquecino.
Incorpora la mantequilla y bate durante dos minutos.
Añade 250g de pulpa de calabaza (guarda lo que sobre para otras preparaciones) y bate de nuevo durante 30 segundos.
Tamiza la harina y la levadura.
Añade a la masa la levadura y una pizca de sal. Incorpora la mitad de la harina y mezcla a mano con una espátula y movimientos suaves. Cuando esté integrada, agrega el resto de harina y repite la operación hasta que obtengas una masa homogénea.
Separa la masa en dos recipientes con la misma cantidad en cada uno.
Derrite el chocolate en el microondas a baja potencia y pequeños tramos de tiempo para que no se queme.
Añade el chocolate a una parte de la masa y mezcla con suavidad hasta que se integre.
Prepara un molde con spray antiadherente o úntalo con mantequilla a temperatura ambiente para que no se pegue.
Vierte las dos masas en el molde alternándolas y pasa una brocheta o un tenedor dentro de la masa, moviéndola a capricho para que se formen las vetas.
Coloca el molde en el recipiente, pon un paño encima y coloca la tapa.
Cocina durante 2 horas en ALTA. Pasada hora y media, comprueba el punto del bizcocho pinchando con una brocheta o un palillo. Si sale limpio, el bizcocho está listo. Si sale húmedo, completa el tiempo de cocción recomendado.
Saca el molde del recipiente, deja que se enfríe y desmolda.
Recomendaciones
No te sorprendas por la diferencia de cantidad entre la calabaza cruda que se indica en los ingredientes y la calabaza cocinada que finalmente se usa. Hay una merma considerable entre la piel que se desecha y el líquido que se pierde. Si te sobra pulpa de calabaza, úsala para añadirla a purés, cremas de verduras o masas de pan.Este bizcocho marmolado de chocolate y calabaza está hecho en un slow cooker de 8 litros con un molde Bavaria Bundt Pan de Nordic Ware.Utiliza baja potencia en el microondas o un fuego muy suave para fundir la mantequilla y el chocolate. Es mejor que lo hagas en tramos cortos y a baja potencia (microondas) para evitar que se quemen. Cuando tengas la mitad del chocolate derretido, bastará con removerlo para que las gotas que aún estén enteras se disuelvan con el calor residual.