Coloca las medidas de café y agua en el recipiente del slow cooker.
Pon un termómetro de sonda en contacto con el líquido, coloca la tapa y calienta en ALTA hasta que alcance 65º.
Apaga el slow cooker, retira el recipiente de la carcasa y deja que se enfríe por completo.
Filtra el café lentamente con un filtro de papel, sin presionar ni forzar el filtrado.
Guarda el café en tarros con cierre hermético en el frigorífico, refrigera durante al menos 10 horas antes de beberlo y consúmelo en los 10 días siguientes.
Recomendaciones
Esta es una bebida refrescante ideal para los meses calurosos o para los amantes del café helado. Guarda el café en el frigorífico y sírvelo muy frío acompañado de leche, bebidas vegetales, hielo en cubitos o picado.*Utiliza una medida que tengas en casa: una taza de café, un vaso más o menos grande, dependiendo de la cantidad de café que quieras hacer o quepa en tu slow cooker. Con el sistema de medidas no tendrás que ceñirte a cantidades fijas y será muy sencillo calcular la cantidad de café que quieras preparar según tus necesidades.