Seca bien los muslos de pato y dóralos en una sartén a fuego fuerte por los dos lados.
Mezcla la pasta de curry con la leche de coco dentro del slow cooker.
Añade los tomates cortados por la mitad, la cebolla troceada en rodajas, el ajo triturado, el jengibre, la citronella, las hojas de albahaca, las hojas de lima kaffir y las hojas de curry, si las usas.
Mezcla y coloca los muslos de pato en el slow cooker.
Cocina durante 3 horas en ALTA.
Saca los muslos de pato a un plato, desmenuza ligeramente la carne, desecha los huesos y cartílagos. Devuelve la carne al guiso y mueve el recipiente para que se integre con la salsa.
Añade salsa de pescado poco a poco probando para que quede al gusto.
Corta la piña en cuñas, elimina la piel y el centro duro. Corta las cuñas en trozos de 1 cm de grosor e incorpóralas al curry.
Sirve muy caliente con unas hojas de albahaca frescas y un acompañamiento de arroz blanco.
Recomendaciones
*No sucumbas a la tentación de utilizar confit de pato en esta receta. El confit es un producto ya cocinado y rico en grasas que está estupendo en otras elaboraciones, pero que perdería todo su encanto tras 3 horas de cocción.Puedes encontrar patas o muslos de pato crudos envasados individualmente en supermercados, los comercializan las mismas marcas que venden magret o pechuga de pato.El curry es picante. Si la capsaicina no es lo tuyo, prueba mejor con otra receta o escoge una pasta de curry con una escala baja de picante.