Esteriliza los tarros hirviéndolos en agua durante 10 minutos. Sácalos del agua, colócalos sobre un paño y deja que se sequen.
Lava los pepinillos y sécalos.
Si vas a hacer los pepinillos en rodajas o láminas, córtalos y reserva.
Mezcla el agua y el vinagre con la sal y el azúcar; remueve hasta que se disuelvan.
Introduce los pepinillos enteros o troceados en los recipientes, añade los granos de mostaza, el tomillo, los granos de pimienta, el laurel, comino y la cayena (opcional), y cubre con la mezcla líquida. Cierra los tarros herméticamente.
Coloca los tarros en el slow coker, pon agua hasta que cubra la mitad de los recipientes y cocina durante 2 horas en ALTA.
Saca los botes y deja que se enfríen. No los abras en caliente, el líquido caliente podría saltar y quemarte. Deja que reposen en frío durante una semana antes de utilizarlos.
Recomendaciones
En la receta no especifico un tipo de vinagre determinado porque no quiero que te vuelvas majara buscando algo que te sea complicado de encontrar. La recomendación general es que sea un vinagre suave y agradable como los de sidra, manzana, Jerez, etc. Evita el vinagre balsámico, no es el más adecuado para esta elaboración.El punto de picante que le da la cayena, así como la cantidad y proporción de especias va a tu gusto. Las cantidades de la receta son una recomendación genaral, pero si eres fan a ultranza del tomillo –por ejemplo–, simplemente ponle más.Puedes hacer pepinillos encurtidos enteros, en láminas o en rodajas según tus preferencias o hacer los botes con una combinación de varios cortes distintos.Es muy importante que no abras los botes hasta que estén completamente fríos, si lo haces cuando están calientes, el líquido saldrá a presión y puedes quemarte.